lunes, 21 de enero de 2019

EL REBELDE NÚMERO 233 DE NOVIEMBRE DE 1986: ALGO PARA LA MENTE


A TERMINAR CON LA PESADA NOCHE QUE YA LLEVA 45 AÑOS

“Porque cada día es 11 de septiembre de 1973 si no acabamos con la dominación capitalista”

Menuda cosa es rastrear documentos históricos, más todavía si tienen relación con nuestra historia.  De esa forma, leyendo El Rebelde número 233[1] (y que por supuesto invitamos a leer), podemos extraer numerosas enseñanzas, que serán mucho más ricas si las contrastamos con el presente, un presente en donde impera, al parecer, sin contrapeso, el poder del capital monopólico financiero.

El número 233 de El Rebelde corresponde a noviembre de 1986 y en su Editorial, donde da cuenta de la opinión política emanada de un Pleno del Comité Central de la época, podemos leer: “¿Cómo enfrentar a esta tiranía que se apoya en el poder de las armas, que usa todo el peso del Estado para cumplir sus propósitos no sólo de mantenerse hasta el ’89, sino de proyectarse aún más allá?   ¿Cómo salir de esta crisis que va destruyendo este país e iniciar la construcción de un régimen de auténtica y profunda democracia?...Unos, buscan desesperadamente la negociación con las FFAA, con el imperialismo y con el capital monopólico financiero…Otros, abandonan “por ahora” las banderas populares y las reservan para una “época mejor”, porque no confían en la capacidad del pueblo.  En los hechos se subordinan a la línea de negociación y renuncian a luchar por una solución real a los problemas del pueblo…Pero también hay quienes estimamos que el pueblo y sus partidos no tienen por qué conformarse con una salida que no recoja ni represente sus intereses.  El pueblo no está derrotado.  Por el contrario,  el extendido sentimiento antidictatorial, los sacrificios y el coraje que han alimentado la lucha durante estos años, demuestran que una salida democrática y popular a la crisis está vigente.  Sólo la lucha independiente del pueblo por el derrocamiento de la dictadura y por la conquista de todos sus derechos –utilizando todas las formas de lucha- , permitirá alcanzar una verdadera democracia, popular y revolucionaria…” (Lo subrayado y en color es nuestro)

De las anteriores palabras, se puede extraer una serie de ideas que nos pueden llevar a la reflexión.  Aquí en este pequeño artículo sólo llamaremos la atención de que en este número de El Rebelde se tipifica en forma certera, sin lugar a ninguna duda, sin ningún atisbo de derrota ideológica y política, la caracterización de lo económico que cruza ese momento hasta la actualidad: imperialismo y capital monopólico-financiero.

En ese instante, todavía no aparecía el sabor de la derrota ideológica que llevó a millones a tipificar al capitalismo como “neoliberal”.

Es más que evidente que desde fines de 1974 hasta el segundo, es la fracción monopólico-financiera de la burguesía la que lleva la voz cantante y dominante-hegemónica al interior del bloque en el poder.  En esa caracterización coincidía el MIR y un sector importante del PS.

Póngase usted a reflexionar: ¿Puede el capital monopólico-financiero aceptar la libre competencia, aceptar el libre mercado, aceptar los precios de equilibrio, aceptar el mercado perfecto?  ¿Puede el capital monopólico-financiero vivir sin el apoyo incondicional de un Estado que a su paso regula hasta la saciedad la estructura de lo económico?

Es impresionante cómo ese artilugio ideológico de los de arriba –nos referimos al “neoliberalismo”- se coló primero entre el reformismo y después fue asumido por el anticapitalismo, por los revolucionari@s.  Veamos cómo han terminado aquellos gobiernos de turno tildados de “antineoliberales”, recordando aquí sólo a Ollanta Humala.

Si hasta los de arriba han debido reconocer que su aparato económico no tiene nada de “neoliberal” y han creado un concepto que suaviza sus escandalosas ganancias, llamándole colusión.

Recordemos algunas prácticas económicas cotidianas que nos recuerdan en lo concreto que no transitamos por un modelo “neoliberal”: el transporte público en Santiago, por ejemplo, su precio no lo fija el cruce de la oferta y la demanda; el precio del transporte público en las afueras de las ciudades es fijado por “una” empresa de transporte y no hay más; los precios de las farmacias, de los supermercados y así, suma y sigue.

¿Y por qué es importante tipificar como capital monopólico-financiero o neoliberalismo?  Eso se lo dejamos a Usted.  Es una invitación abierta a reflexionar, a investigar, a debatir.  Reflexiona.

El aspecto político de lo que fuera escrito en 1986 también lo dejamos al debate, a la reflexión de todos y todas.  Todavía algún@s luchan por el Socialismo sustentado en el Poder Popular; otr@s se arrinconaron en esta democracia pasada a lacrimógena, esta democracia contrainsurgente y apoyan a la dominación a hacer creer de que estamos en democracia y con ello potencian el necesario consenso que necesita el conjunto de la burguesía para proseguir obteniendo sus astronómicas ganancias en medio de una paz social que ya se la quisieran los grupos económicos del siglo pasado y antepasado.

El Rebelde número 233 de noviembre de 1986 termina con un artículo sobre el basural de Lo Errázuriz, en donde el Grupo Económico Luksic hacía de las suyas.  Algo así como “antigua zona de sacrificio”, con la diferencia que en ese minuto todavía se seguía peleando contra un enemigo común y todavía no afloraban las miles y miles de fragmentaciones a la que se sometió al Movimiento Popular y Social que se expresarían luego de 1990 en donde lo político se disoció de lo social y viceversa o más bien se prohibía ligar lo político a lo social o a lo sindical y comenzaron los trabajos locales, levantando demandas locales, específicas, levantando las parcelas, feudos.

Finalmente, pero no menor, es que ese número 233 de El Rebelde, corresponde a noviembre de 1986, mes y año en que dos valiosos Compañeros del MIR libraron su último combate terrestre en Peñaflor.  Los Camaradas Luis Alberto Barra García y José Modesto Amigo Latorre, querían no sólo remontar la crisis partidaria, sino que empujar decididamente la lucha antidictatorial.  Ellos pusieron su corazón, su entrega, sus convicciones, su amor por los explotados.

Debemos seguir estudiando, investigando, contrastando, yendo a la realidad, volviendo a la teoría, buscando la mejor forma de vencer, de suprimir está larga y dolorosa noche de más de 45 años.

PUEBLO CONCIENCIA FUSIL


Movimiento de Izquierda Revolucionaria MIR

Enero 21 de 2019

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