domingo, 4 de diciembre de 2022

ANALISIS Y PERSPECTIVAS DE LA SITUACION POLITICA NACIONAL CHILE SEPTIEMBRE–NOVIEMBRE 2022

ANALISIS Y PERSPECTIVAS DE LA SITUACION POLITICA NACIONAL

CHILE SEPTIEMBRE–NOVIEMBRE 2022

 

En el período, en el marco de las graves secuelas económico-sociales dejadas por la pandemia y de los efectos de una feroz etapa de transición imperialista, l@s explotad@s de Chile continúan pagando la crisis, mientras que el capital monopólico financiero aliado al capital transnacional se enriquece, sin detenerse a preparar las condiciones para enfrentar de mejor forma la estanflación que se viene en 2023. En tanto, el Gobierno de reformistas y neorreformistas, que pasan a adscribirse plenamente a los grupos mantenedores y reproductores del sistema y, por extensión, al bloque político de Estado, aprueba e impulsa reformas que no resolverán la postración de la mayoría nacional y tampoco contribuirán a desplegar un modelo económico productivo y que distribuya de mejor forma la riqueza que l@s explotad@s producen.

En cuanto al embuste constitucional, no es que haya ganado el Rechazo; lo que triunfó fue la expresión rotunda de un electorado que expresó que no quiere que le vendan más la pomada y que sabe que la resolución a sus problemas no va por el camino de rayar un voto para aceptar o rechazar las ofertas de los sectores dominantes y sus lacayos en la arena política.

Y aunque pocas, muy importantes fueron las expresiones de lucha desplegadas por diversas fuerzas del campo popular, de estudiantes, poblador@s, trabajador@s, tanto sectoriales como nacionales y en este último ámbito, en torno a los aniversarios por un nuevo ‘11’ y el 3º de la Rebelión Popular del 18-O. Si bien la “democracia de los 32 años” no da para más, será gracias a la lucha unitaria y ofensiva de los pueblos y trabajador@s de Chile que estos podrán darle su patada en el trasero a quienes los dominan. Y muchos ya lo saben, lo que se expresaba en un lienzo desplegado fuera de una minera, al amanecer del pasado 18 de octubre: “La clase obrera unida, organizada y en lucha, vencerá”.

 

 

1) El capital monopólico se enriquece, la clase trabajadora paga la crisis y el ‘Gobierno de la Esperanza’ como si lloviera

 

En el trimestre, se deterioran las perspectivas para la actividad productiva y comercial del conjunto del Sistema Capitalista Mundial (SCM) (5/10, OMC), en tanto que se rigidizan aún más las condiciones impuestas por el gran capital transnacional sobre el conjunto de las Formaciones Económico-Sociales (FES). Los portavoces oficiosos de los sectores dominantes apuntan a un prolongado ajuste monetario de las formaciones del centro del sistema, el que obviamente se haría sentir en las periféricas e intermedias. En todas ellas se constatan elevados niveles de volatilidad respecto de activos y variables económicas, provocados –principalmente- por los especulativos y rapaces negociados del capital financiero, pero contribuyendo a potenciar dicha situación los raquíticos mecanismos internos de control fiscal y político que obran sobre aquel leviatán. La inflación continúa mostrándose persistente y en lo que representa una mera respuesta procíclica frente a este fenómeno, los bancos centrales se afanan por elevar sus tasas de referencia, encareciendo el financiamiento externo, pero también alentando una abrupta salida de los capitales “golondrinas” y abatiendo el valor de las materias primas. El cuadro anterior incide en un fortalecimiento del dólar a escala mundial y de los instrumentos financieros en dicha moneda, lo mismo que de las tasas de interés de largo plazo (lucrativas actividades en que interactúan las IFI, el capital financiero transnacional y las potencias centrales) y el círculo vicioso, entonces, queda convertido en una espiral. Consecuentemente, los precios de las materias primas oscilan al ritmo ordenado por los poderes imperiales: a pesar que entre septiembre y noviembre lo que cuesta un barril de petróleo (OPEP) se reduce en un 7,7%, en lo que va del año su valor se ha encumbrado un 16,1% (DM), encarecimiento atribuible -en gran parte- al embargo económico y petrolero yanqui a Venezuela, Rusia e Irán y su política hostil hacia Arabia Saudí; en tanto, si bien la libra de cobre mantuvo su precio en el período, cercano a los US$3,5, su valor decae desde 2021, cuando su promedio alcanzó los US$4,11 y Cochilco aguarda que recién el próximo año pueda remontar a los US$3,95.

 

Ya habíamos hecho notar que las IFI, una vez pasado lo peor de la pandemia causada por el COVID-19, se afanan por reordenar el sistema para el mayor beneficio de los sectores dominantes mundiales. En consonancia con ello, del 18 al 27 de octubre, agentes del FMI vinieron a dar instrucciones a Boric y su equipo sobre cómo resguardar lo económico y gestionar las políticas económicas internas. Primero, la ‘misión’ proconsular se dedicó a asustar, informando que nuestro PIB crecerá sólo un 2% este año (luego del 11,7% de 2021), asociado a una alta inflación, del 12,1% y con una tasa de desempleo del 8%; que el producto sería de un -1,3% en 2023, consiguiendo rebajar el IPC a un 5%, pero que entonces la cesantía escalará a un 8,5%. Luego, pasó a endulzar el discurso, afirmando que, “tras una notable recuperación posterior a la pandemia (…), la economía chilena está experimentando una transición necesaria hacia un crecimiento más sostenible” (FMI), debiéndose entender esto último como el inicuo y desigual esquema de siempre, pero sin estímulos económicos estatales para atender el consumo y a los sectores productivos (excepción hecha de las áreas en manos del capital monopólico-financiero, como la gran minería). Los riesgos internos, según estos perspicaces cuestores, “están relacionados con una inflación elevada que se prolongue más de lo previsto, malestar social por los precios elevados de los alimentos y la energía, lentitud en las reformas para satisfacer las demandas sociales. Si bien se espera que el proceso de reforma constitucional continúe, la incertidumbre sobre su resultado se ha aminorado”. Confiesan, entonces, su temor a que el empeoramiento de las condiciones objetivas incrementen el cuestionamiento social al actual modelo de dominación/explotación y sus nefastos efectos, y dan fe que el zigzagueante proceso constitucional y la gestión del gobierno AD no afectan ni afectarán para nada las bases del mismo. Casi al finalizar su informe, los guardianes del gran capital se permiten una admonición: “los retiros de los ahorros pensionales y la incertidumbre en torno al futuro de las AFPs han menoscabado la profundidad y la liquidez del mercado de capital interno”; o sea, es absolutamente verdad lo planteado por los detractores de las AFP y del sistema de pensiones vigente: esos fondos no están orientados a proveer pensiones de calidad y de un monto suficiente, sino a guardarle las espaldas al Capital Monopólico Financiero (CMF), afianzar sus transacciones y asegurarle suculentos dividendos.

 

La misión IFI, de paso, felicitó a Marcel y sus muchachos por el saldo fiscal de un 1,6% del PIB proyectado para este año (el primer superávit en una década), frente al déficit de un 7,7% en 2021, ‘logro’ asociado al retiro de las medidas de estímulo relacionadas con la pandemia y una relativa mayor recaudación (motivada por factores excepcionales). En lo que constituye otro ‘éxito’ para el FMI, el Gobierno repuso US$6 mil millones en el fondo de ahorro soberano (un invento de 2006, mandatado por las IFI), en circunstancias que es indiscutible la necesidad de echar mano ahora a dichos recursos y paliar las dificultades económico-sociales ocasionadas por la pandemia, mediante una inversión productiva a cargo del Estado, así como preparar las condiciones para enfrentar la crisis económica que ya campea y que arreciaría en 2023. En medio del río revuelto, el CMF sólo ansía beneficiarse, especulando y extrayendo divisas hacia fondos corporativos en el centro imperial y sin que le preocupe prevenir debacle alguna (total, en todas estas catástrofes recrudece la concentración y centralización de capitales, que es el sustrato de su engrandecimiento).

 

La madre de las IFI no se cuestiona que aquí, a diferencia de otras FES más interesadas en un desarrollo productivo (ej., China), presentemos un saldo negativo en cuanto a crecimiento de la producción industrial o de la inversión en activos fijos. En el informe sobre el Imacec de septiembre (2/11, BCCh), se puede constatar que los indicadores relacionados con el volumen de la producción y ventas de las empresas son negativos en los 12 meses previos, sobre todo por la caída del comercio, con un saldo negativo de -10,2%, y de las industrias manufacturera y minera; en suma, la gente está comprando menos y se restringe agudamente la actividad del segmento productivo. Sin embargo, al jefe de las arcas fiscales le resulta natural que la economía siga, “haciendo su ajuste por el lado del gasto, del consumo, lo cual se refleja en la actividad del comercio” y se alegra porque ese ajuste, “(…) no está arrastrando a otros sectores”. A Marcel le parece que el -0,4% del Imacec de septiembre, en comparación con igual mes de 2021, fue menor a lo esperado y allí se queda, sin dimensionar que éste traspié se suma a otros indicios que apuntan al arribo de una franca crisis económica y mostrándose incapaz de anunciar medidas coherentes y eficaces para evitarla o al menos mitigar sus consecuencias, las que de todas maneras afectan y afectarán a la clase trabajadora.

    

En cuanto a la esquiva inversión extranjera, esta ha mantenido su nivel si comparamos los 3 primeros trimestres de 2021-22: US$17 mil millones. Por ello, en septiembre, Boric y Marcel anuncian -con harto bombo- un plan de nombre muy original: “Invirtamos en Chile” (12/9, InvestChile), mediante el cual se desplegarán 28 medidas para atraer un 5% más de capitales desde 2023, entre las que se consulta: mejorar la infraestructura, disponibilidad de energía y vías de transporte existentes, sobre todo en el ámbito de la minería; proveer procedimientos institucionales que favorezcan incluso más la entrada (y salida) de divisas; reabrir agregadurías de inversión; optimizar el acceso al financiamiento y obviamente se aplicarán, “estímulos tributarios a la inversión privada”. En el último caso, ello se traducirá en una menor recaudación fiscal, lo que se puede constatar en que los nuevos proyectos de minería del cobre estarán exentos del componente ad valorem del royalty por 5 años, ofreciéndole al CMT ampliar su margen de ganancia para que se decida a invertir. Sin embargo, como el capital financiero es insaciable, a mediados de noviembre (16/11, RBB) la Sonami se permite algunas quejas en relación con el proyecto que se discute en el Congreso sobre royalty a la minería: “mantiene una carga tributaria excesiva” y “afectará la competitividad del sector”, en circunstancias que, de seguir su proceso legislativo, se va camino a imponer una nueva “Ley Longueira”: los capitales que usufructúan del cobre y litio también van a poder evitar el pago de millones de dólares respecto de lo que deberían haber pagado como royalty, extendiéndose, además, el período de invariabilidad tributaria del que pueden gozar.         

   

A pesar del evidente y desvergonzado agiotismo perpetrado por el gran empresariado, reflejado en una imparable alza de precios aun cuando los inventarios de empresas comerciales y manufactureras se han reforzado (un 3,4% a septiembre, para las primeras -14/11, INE), ni el Ejecutivo AD o alguna instancia oficial (excepto un fugaz anuncio de la FNE, a mitad de año, que nadie supo en que quedó -27/11, CHV) han manifestado su reparo y menos pretendido esclarecer y sancionar la especulación y la colusión que hay detrás. En cambio, el Gobierno argentino (2/11, RBB) ordenó investigar a las empresas vinculadas con la producción y comercialización de bienes de consumo masivo que hayan aumentado precios como resultado de un abuso de su posición dominante, por encima de la inflación general y de otras variables que afectan a los costos de producción. Una semana después (11/11, LN), el Ejecutivo peronista, supermercados y grandes proveedores anuncian un acuerdo, mediante el cual se mantendrán fijos o con alzas reguladas los precios de casi 2.000 productos; además, que existe el compromiso empresarial que en los próximos 4 meses, en el resto de los 30 mil productos que producen, no habrá aumentos mayores de un 4%.

 

Por muy ‘progre’ que pueda parecer aquel juego de manos del peronismo, la verdad es que una cosa así ni siquiera se le ha pasado por la cabeza a las autoridades del Reformismo-Neorreformismo (R-NR) vernáculo. Y eso que aquí, según el INE (8/11), aunque los precios al consumidor sólo se alzaron un 0,5% en octubre (respecto a septiembre), su incremento totaliza ya un 11,4% entre enero-octubre y 12,8% a 12 meses, destacándose las de alimentos y transporte; que el valor de la canasta básica de alimentos (de 79 productos) sigue con alzas récord y traspasó los $60 mil en septiembre, cuando su variación anual previa acumuló nada menos que un 23,1% (sólo bajaría a 22,8% en octubre, sobre un intervalo equivalente); y que el valor de las líneas de pobreza y de pobreza extrema por persona alcanzaron los $210.529 y $140.352, respectivamente, lo que implica un alza en 12 meses de 16,2%. Pues bien, ocurre que en nuestra FES la lesión infligida por el gran capital al interés económico general y sobre todo en lo relativo a la producción y comercialización de alimentos resulta evidente, toda vez que se trata de producción mayoritariamente nacional, en base a materias primas locales, con condiciones naturales y de infraestructura para proveer alimentos a precios razonables, y habida consideración de las variables económicas vigentes. Conadecus acusaba hace rato (19/4, DUC) al oligopolio empresarial de distribución y venta de productos de primera necesidad, tales como Unimarc y Wallmart, que en ciertos casos controlan prácticamente el 90% de la comercialización de algunos de aquellos, como principales responsables de su encarecimiento y que lo hacen a pesar de contar con suficiente inventario. Clamaron por una investigación profunda, pero –a la fecha- no se oye padre.

 

Y a mayores precios, mayores ganancias para el CMF. Como que el grupo empresarial que incluye a Unimarc, SMU, obtuvo ganancias a septiembre de este año 116% superiores a las de los 9 meses iniciales de 2021; en tanto, Empresas Copec (de los Angelini) anotó un incremento de 30% en similar período. Sólo algunas megatiendas vieron mermas en sus entradas respecto de 2021 (sin llegar a sufrir pérdidas), pero ello se explica por las restricciones de política económica, directas e indirectas, señaladas antes: Walmart (Ibáñez), Cencosud (Paulmann), Falabella, etc. Finalmente, anotemos que los grupos monopólicos tras las AFP se embolsaron suculentas utilidades al finalizar el 3er trimestre 2022, 9% mayores que en 2021 y que la banca privada la hizo de oro en el mismo lapso, con ganancias que significan un 42% más; por ejemplo, el Banco de Chile, de Luksic y Citi, a pesar del terror económico que el principal CMF ha propalado, logró duplicar las suyas.  

 

Por lo visto, la clase trabajadora es y seguirá siendo la que pague la actual crisis pospandemia y también la que se abatirá sobre el SCM, acompañada con estanflación, en 2023. Sin atender a que la cesantía pasará de 8% a un 8,5% en 2023; que la tasa de ocupación informal (i.e. empleo precario) se ubica cerca del 28% y sigue creciendo; y que si bien la remuneración nominal creció un 42% entre septiembre 2016 y septiembre pasado (INE, base 2016=100), en el mismo lapso el precio de un kilo de pan lo hizo en un 90% (2/9/16, ODEPA), el Bloque Político de Estado (BPE) ya decidió continuar por la senda del mero asistencialismo para intentar que l@s explotad@s y desposeídos capeen aquella compleja situación, descartando de tal manera cualquier estrategia productiva y distributiva de la riqueza nacional. Así, Gobierno y estrato político civil impulsan una reasignación y focalización del gasto dentro de la dotación presupuestaria para apoyar sólo a sectores vulnerables, pertenecientes a los dos o tres primeros quintiles, lo que incluiría: i) bonos para mitigar el impacto de los altos precios de la energía y los alimentos; ii) subsidios a ciertos segmentos empresariales ligados a los servicios para contratación de mano de obra barata; e iii) “transferencias focalizadas para los hogares”, lo que se traduciría en el otorgamiento de facilidades a las familias de menores ingresos para el pago de servicios y algunas canastas acotadas de prestaciones sociales. Pero, mientras las autoridades hablan de quintiles, las cifras demuestran que sólo un 5 o un 10% de la población puede llevar una vida tranquila y llegar a fin de mes sin endeudarse (FS). Por otro lado, el 90% o 95% restante necesita de un gran salvavidas y clama hace rato por un país más justo, que asegure derechos básicos públicos; para ellos, un cierto nivel de desarrollo sólo ha sido posible a través de la tarjeta plástica, fomentándose con ello el endeudamiento. La focalización de políticas sociales, una de las principales reformas estatales impuestas durante la Dictadura y que se ha mantenido hasta hoy, consistió en que las políticas sociales pasaron del cuasi universalismo (entendidas como un derecho social) a la asignación de recursos. Es decir, pasamos de un Estado de semi-bienestar a uno de tipo subsidiario, que emplea mecanismos selectivos para determinar quiénes son los más necesitados. La ‘secta de los arbolitos’ prosigue con esta política, cuya aplicación producen estratificación, competencia y desconfianza entre explotad@s y marginad@s, debilita la organización popular, promueve el ‘sálvese quien pueda’ y el ‘arribismo’, descolectivizando la lucha por los derechos fundamentales y sociales (Özler, 2012). Al alero de esta focalización, l@s necesitad@s se han transformado en meros postulantes, competitivos, aislados, ‘llorones’; en tanto que l@s dirigentes sociales devinieron en gestores de proyectos burocráticos y técnicos, diluyendo sus roles de organizadores e impulsores de la lucha reivindicativa y rupturista (de la Jara, 2003; Letelier, 2018)  

 

 

2) Las derechas política y económica presionan y obtienen lo suyo de Boric y compañía

 

En el período, junto con continuar ajustando su paso a la etapa de transición imperialista en curso, los integrantes de nuestro doméstico BPE terminan por consumar una comunidad de intereses: los sectores dominantes y parte de los Grupos Mantenedores y Reproductores del Sistema (GMRS): desertores del PDC, “Amarillos”, descolgados del PDG y “Muchedumbre”, presionan y logran imponer al gobierno de Apruebo Dignidad (AD), a las fuerzas del Reformismo-Neorreformismo (R-NR), posiciones y prácticas que –en los hechos- permiten identificarlos ya como impulsores de la mantención y reproducción del sistema de dominación/explotación, avalando e impulsando estos últimos medidas y políticas económicas, sociales y represivas en línea con las orientaciones impuestas desde el centro del SCM y que convienen al capital monopólico-financiero interno aliado al capital transnacional.  

 

En línea con lo expuesto, las IFI, las potencias centrales, el capital transnacional y sus socios internos logran el apoyo de los estólidos del Congreso para aprobar el ingreso de Chile al TPP11 (11/10). Luego de ello, el lechuguino Marcel afirmaría que nos convenía y que empezaría a operar rapidito, a inicios del 2023, con o sin las famosas cartas laterales (side letters), insistiendo en que, “la protección de las inversiones es un tema en discusión y hay cosas que mejorar”, recalcando que era estar mejor dentro que fuera, pues no era bueno “mantenernos aislados”.

 

El gran empresariado no cesa de chillar que todo va pésimo y presagia un escenario económico-social adverso, al que contribuirían la elevada incertidumbre política, alta inflación, deterioro de los términos de intercambio, contracción de la inversión, encarecimiento del empleo (derivado de ciertas incomodas reformas del Ejecutivo) y una tremenda inseguridad para sus negocios y la sacrosanta propiedad privada, sin dejar tiempo para desvelar que la inmensa concentración y centralización de los capitales que ha perpetrado le permiten manejar o relativizar todas aquellas situaciones. Y eso que el recién electo Boric, en enero pasado, les aseguraba que era lo que tenía presupuestado implementar en su mandato era una reforma tributaria "conversada", que no se debía ver cómo, "un enfrentamiento entre clases sociales", sino como el fruto de un acuerdo que protege la inversión y avance hacia una sociedad más justa; que más que la decisión de un gobierno sea, "un nuevo pacto fiscal (…) producto de un diálogo social amplio (…), con cambios duraderos y estables en el tiempo".  

    

Las derechas económica, política y mediática, cuando vociferan que la inseguridad y el terror son patentes en todos lados, que para atenuarlo hace falta mayor seguridad, más milicos y pacos en las calles y campos, no se refieren al temor que siente el/la poblador/a o el/a trabajador/a ni a su necesidad que cuiden lo poco que tiene, sino que están generalizando el pavor que sienten a perder su propiedad o parte de ella, sus ganancias, su poder, y exigen que el Estado de clase, burgués por antonomasia, le vigile su riqueza y dominio con los aparatos armados a su disposición. Con tanta alharaca matan varios pájaros de un tiro: primero, defender y mantener sus prebendas y su posición; segundo, que AD y todo el arco del R-NR continúen haciendo el trabajo sucio de la represión (para lo que se han prestado dócil y solícitamente); y tercero, que los pueblos y l@s trabajador@s pervivan en una constante paranoia, la que les imposibilite ver de frente su propia realidad, les aísle socialmente -y políticamente- por lo del pánico al otro (a lo que vino a cooperar la pandemia y las medidas de enclaustramiento para enfrentarla), y que les lleve a exigir más represión y menos libertades.

 

Al finalizar el período y tras ocho días de carreteras bloqueadas y amenazas de desabastecimiento, la paralización de un sector de medianos empresarios camioneros llegó a su fin gracias a la oportuna intervención de los dueños del país. La movilización fue convocada por una desconocida Confederación de Transportistas Fuerza del Norte, a raíz de la constante alza en el precio de los combustibles y de reiterados hechos delictivos sufridos por los conductores de camiones. No todos los gremios del rubro adhieren al movimiento. La Confederación Nacional de Dueños de Camiones (CNDC), uno de los perros grandes, tildó el llamado a paro como “absolutamente irresponsable”, asegurando que “el presente es el momento menos indicado para iniciar acciones de fuerza”, dadas “las graves dificultades económicas por las que atraviesa el país”. En esos días, los dirigentes de la Confederación Nacional de Transporte de Carga (CNTC) se reúnen con el capo de Hacienda para conseguir medidas que los puedan eximir de las alzas de los combustibles y para enfrentar ciertos problemas de seguridad. Tras la reunión con la autoridad, el presidente de esa Confederación, el bravucón Sergio Pérez, indicó que hubo un acercamiento: “va a haber una variabilidad no semanal del Mecanismo de Estabilización del Precio de los Combustibles (MEPCO), sino que en mayores plazos, y vamos a tratar de que haya estabilización del valor del litro de petróleo”; además, esto se va a traducir en un compromiso formal con el Gobierno, indicó. Sin embargo, pese a dichos acuerdos, el 22 prosigue el paro convocado por los de la Fuerza del Norte, entre Arica y Paine, sumando más organizaciones y se extiende hacia las regiones de Valparaíso y de O’Higgins. El 24, las representaciones de los grandes empresarios y agricultores se alinean con el Gobierno; CPC y SNA cuestionan la paralización de camioneros en forma y fondo. Por lo demás, el presidente de la SNA advirtió de un probable desabastecimiento en los diferentes locales de ventas, en el caso que la paralización persistiera en el tiempo. Luego de un par de extensas jornadas de negociaciones, el lunes 28/11 se firmó en el M. de Transportes un acuerdo entre los cabecillas del movimiento, los mandamases de la CPC, encabezados por su presidente Juanito Sutil, y autoridades del Gobierno, mediante el cual los primeros lograban que se les eximiese de alzas en el precio de los combustibles por 4 meses, que se refuerce el Mepco, la extensión del beneficio de reintegro parcial del impuesto específico por –al menos- un año (sus principales demandas), pero también que se reforzase la seguridad en el norte, donde alegan que son atacados por inmigrantes ilegales. Los segundos, reafirmaban su rol de árbitros o primus inter pares del empresariado, capaces de manejar y resolver un conflicto político que al Gobierno ya se le estaba yendo de las manos, remediando de paso graves dificultades económicas que el asunto les estaba provocando. El tercer actor, el Ejecutivo AD, resultó ser el mero aval de un acuerdo tomado entre empresarios, aunque poniendo las lucas para hacerlo posible, las que saldrán del bolsillo de la mayoría nacional, que más encima debe pagar mayores precios por los productos que el movimiento terrorista encareció. En todo caso, para que no se diga, el ‘sapo’ Monsalve aseguró que las querellas por Ley de Seguridad Interior del Estado iban igual (pero todos sabemos que eso es un bluff).

 

 

 

 

3) Los antiguos y nuevos mantenedores del modelo venden la pescada de las reformas para reforzar la continuidad de este

 

Si una situación destaca en el período, aunque con raíces en hechos anteriores, es la adscripción de las fuerzas del Reformismo-Neorreformismo (R-NR), que conforman el cimiento del gobierno de Apruebo Dignidad (AD), a los GMRS (que antes identificábamos sólo con la exNM). Boric y AD, lisa y llanamente, pasan a asumir como propias políticas y prácticas económicas, políticas, ideológicas y represivas que están en la base del modelo de dominación/explotación heredado de la Dictadura cívico-militar, cumpliendo activamente el rol de reformadores de las mismas no porque haya que democratizarlas o ponerlas al servicio del interés mayoritario, sino para hacerlas más digeribles y –de paso- tratar de demostrar que pueden cumplir con su programa electoral.

 

Es más, luego del contundente rechazo electoral a la propuesta constitucional de la Convención ídem, el 4/9, AD culmina su adscripción al lote de los GMRS mediante la integración con “Socialismo Democrático”: PS, PPD, PR, P. Liberal y Nuevo Trato, desechando cambios más profundos a un modelo que –de la boca para fuera- habían execrado hasta marzo anterior. No es casual, entonces, la salida del Ministerio de Interior de la PC Siches y la llegada al mismo de una de las íconos de la exConcertación, la hiperrenovada Carolina Tohá, el 6/9. Volveremos sobre esto más abajo.

 

En consonancia con su identidad con los GMRS, Boric y AD anuncian algunas reformas y reactivan otras: en la previsión, sobre la jornada laboral de ’40 horas’, “por la paz y entendimiento” con el pueblo Mapuche, etc. Ya anteriormente, el Ejecutivo había implementado un subsidio para paliar las alzas de los alimentos, dado a conocer –de manera muy general- un proyecto de reforma tributaria y entregado luz verde para la discusión –y probable aprobación- del nocivo TTP-11.  

 

El 2/11, con gran parafernalia, Boric anuncia que se viene una reforma en el sistema de AFP, mediante la cual estas se ‘extinguirían’ en un plazo de 24 meses y se avanzaría a un orden previsional mixto, aportando que junto a las entidades privadas existirá, “una alternativa pública”, que según él, “permitirá aumentar la competencia con nuevos actores” (RBB). Para dar más sustancia al anuncio, el guatón expone que el fondo general pasaría a conformarse con un 10.5% de cotización individual y otra de 6%, con cargo al empleador. De acuerdo a la propuesta del guaripola del R-NR, que aún debe pasar por la cueva del Congreso y los 205 ladrones, ese 6% -se supone- sólo podrá ser invertido por el Estado y el resto por privados si el cotizante así lo decidiera. La verdad sea dicha, las chiches del capital financiero –las AFP- no mueren; cambian de nombre a ‘gestoras de inversión’ y se les permite delegar la administración directa de los fondos (dejando tal carga o soporte al IPS), para centrase en el empleo y especulación del ahorro acumulado. Para esto último se les aumentará el flujo de capital desde un 10 a un 10,5%, asegurándoles así una inmensa fuente de ahorro para potenciar el mercado financiero, que es la meta última de este proyecto (3/11, LV). Tal reforma no resuelve los cuestionamientos de fondo hechos al sistema previsional impuesto bajo Dictadura: en ningún caso es una solución a la carencia de un sistema de seguridad social; la ‘gestora de inversión pública’, para poder competir y conseguir algo de rentabilidad, tendrá que actuar como una inversora cualquiera, además de verse obligada a contratar expertos privados y pagar comisiones con cargo a l@s imponentes; el inmenso ahorro forzoso acumulado (US$148.8 mil millones) no pasará directa y automáticamente al nuevo ente público, a diferencia del 6%, ya que permanecerá en el espacio de las AFP -devenidas en ‘gestoras’- y los traspasos serán individuales; tampoco es verdad que aquel famoso 6% vaya íntegro a un fondo común, toda vez que sólo un 30% iría a ello y el resto a un registro contable; nada se dice sobre la desaparición del Retiro Programado, con lo cual salen ganando las compañías aseguradoras; a estas últimas, que se benefician y seguirán haciéndolo con las rentas vitalicias y varias de las cuales son dueñas o grandes accionistas de las AFP, se les endosará el gran pozo acumulado (es decir, ‘las güiñas cuidando la carnicería’); el aumento de la cotización (del 10 al 16,5%) y el cambio de los multifondos a unos generacionales no aseguran, dentro de una modalidad de ahorro individual y de rentabilidad variable que se mantienen, que pueda autofinanciarse una pensión adecuada y será la PGU, o sea el Estado, la que aportará más a las pensiones. A propósito de la PGU, que debiera subir a $250 mil, ella se financia con recursos públicos originados -en su mayor parte- por el impuesto más regresivo: el IVA, convirtiéndose en un segundo “respirador artificial” para el sistema (el primero fue el “pilar solidario”, de Bachelet y Marcel), lo que permitirá descomprimir la presión social por un tiempo, al aumentar el monto de las pensiones más pobres, en especial las del pilar no contributivo. Y era qué no, ante este relanzamiento de las AFP, las derechas económica, política y mediática chillan como cerdos, mostrándose fieras defensoras de lo que saben no les será arrebatado y aspirando a mayores cuotas de participación del gran negociado expoliador de los fondos previsionales.  

     

La primera semana de noviembre, el proyecto para reducir a 40 horas la jornada laboral reingresa por enésima vez al Senado para ser analizado (9/11, Senado.cl). El Gobierno lo había reactivado y lanzado como un caramelo en agosto anterior, buscando que fuera aceptada la propuesta constitucional de la CC. Si bien dicha disminución es una medida necesaria para combatir la cada vez más complicada vida actual, las escasas horas destinadas a actividades no laborales y el pobre valor que tiene la fuerza de trabajo en Chile (entendiendo que se busca rebajar la jornada sin que lo hagan los salarios), ya habíamos apuntado que la estructuralmente injusta y desigual situación que enfrenta nuestra clase trabajadora no cambiará porque le sea aplicada una jornada menor (para lo cual el empresariado hace rato que cuenta con las condiciones estructurales para generar plusvalía, acortando el tiempo socialmente necesario para la producción y distribución de mercancías). Más encima, el R-NR propone que aquella rebaja horaria se haga de manera escalonada y ¡a 5 años! Aparte de otras consideraciones, la reducción de la jornada laboral máxima no es una política neutra (18/10, FS), puesto que el intercambio entre quien vende su fuerza de trabajo y quien la compra es siempre un intercambio entre desiguales. La discusión, entonces, debiera centrarse con más firmeza en el desmantelamiento del modelo de superexplotación capitalista implantado en nuestra FES y, en lo específico, las fuerzas populares y revolucionarias tienen el deber de reimpulsar un sindicalismo de clase y rupturista, libre de los vicios y deleznables prácticas que lo vienen consumiendo hace tanto rato.

 

Casi en los idus de noviembre, terminando su raid por algunos puntos de La Araucanía, el guatón Boric ofrece la creación de una comisión, “por la paz y el entendimiento” entre el Estado y el pueblo Mapuche, que se orientaría a descubrir el agua caliente: determinar la legítima posesión de tierras de esas comunidades originarias e intentar resolver ese aspecto del “conflicto indígena”. Pero si en algo se alineó el Gobierno con la patronal fue en mantener el estado de excepción y la militarización en el Wallmapu, junto con tipificar las acciones de resistencia de las organizaciones de avanzada del pueblo Mapuche como ‘terroristas’ y en asociar el robo de madera, el narcotráfico y acciones delincuenciales en general con aquella lucha consecuente y ofensiva.   

 

El Aporte Canasta Básica, también conocido como Aporte Mensual Compensatorio, es un típico bono de la focalización en boga, que comenzó a pagarse desde el 1 de mayo de este año y lo será hasta el 30/4/23. Va dirigido a las familias más pobres, encasilladas en los primeros 3 quintiles y tiene como objetivo intentar compensar el alza en los costos de la Canasta Básica de Alimentos (CBA), entregando un monto de $10.803 (al 30/11) por carga familiar. Pero dicho aporte cubre bastante poco del aumento que han sufrido los precios de los alimentos, que a octubre anotó un alza anual de 22,8% para la CBA, alzas que se afianzarán con el reciente paro de camioneros y el agiotaje mercantil.

 

Con base en su reforma tributaria, Boric propone aumentar la recaudación fiscal en 5% del PIB, en cuatro años, para financiar algunas mejoras sociales, bajo un compromiso de "responsabilidad fiscal" y gradualidad en la aplicación de los cambios. Se supone que este plan contempla subir impuestos a los más ricos, a las empresas, a los combustibles y establecer un royalty a las empresas mineras, así como rebajar el IVA. Aclaremos que en Chile, desde hace unos 25 años, se viene recaudando lo mismo: entre 20-21% del PIB (11/10, LV), lo que es una anomalía, pues al aumentar el producto debiera aumentar también la tributación, la que debiera ser –comparando los aportes según evolución del PIB- de un 30% en nuestra FES. Por lo anterior, el aumentar la carga tributaria a 25-26% para 2026, como consigna y espera el Gobierno, no es ni de lejos una potente embestida contra la desigualdad e injusticia económico-social vigente en Chile; ni siquiera alcanza a ser una normalización de esa carga si nos comparamos con otras FES capitalistas, como las de la OCDE.  

 

La aceptación congresal del pernicioso TPP11 se dio pese a los múltiples llamados de sectores populares para que Boric utilizase su facultad como Ejecutivo, señalada en el artículo 132 del reglamento del Senado, para retirar el proyecto de la discusión legislativa, cumpliendo así con el programa con que se comprometió ante el electorado y que no incluía la firma de aquel imperial tratado. Varios dirigentes sindicales recordaban que durante la campaña electoral del guatón le plantearon la necesidad de avanzar hacia un nuevo modelo de desarrollo (7/10, DUC), con lo que el patagónico dijo estar de acuerdo, con un Estado capaz de asumir el rol protagónico en un proceso de desarrollo industrial y en que de verdad se cumpliera con acrecentar el valor agregado de nuestras materias primas. Era extendido el temor a que la aprobación del TPP11 significase hipotecar el desarrollo de nuestro país, concediendo parte de la soberanía y condenándonos a profundizar nuestro encadenamiento al modelo del CMF, primario-exportador y rentista, el cual impide el potenciamiento de las fuerzas productivas de nuestra FES y sólo sirve para enriquecer a una minoría parasitaria.

 

Sobre la derrota de la propuesta de Constitución de la CC (que nadie leyó), podemos apuntar una serie de explicaciones: a) la introducción de un significativo grado de alarma en grandes sectores del electorado, impulsado por los sectores dominantes y parte de los mismos GMRS, respecto de la posible sustracción de bienes y derechos en caso de ganar el Apruebo (y los coaligados lo hicieron sin asco, pues sabían que sin importar el resultado del famoso plebiscito, la hegemonía del bloque en el poder continuaría a resguardo); b) la obligatoriedad del voto en la ocasión generó una repulsa en buena parte del electorado, alentando el rechazo como respuesta a aquello; c) no menor fue la consistente campaña mediática e ideológica de las derechas y una fracción de los GMRS para dejar instalado en las cabezas de segmentos más receptivos que el triunfo del apruebo abriría la puerta a una reacción violenta de los sectores dominantes (incluido al Golpismo). Con todo y para lo cual nunca escuchamos una autocrítica por parte del arco R-NR, una de las principales causas del rechazo en sectores populares fue que, a poco de llegar a La Moneda, Boric y los suyos dejaron de lado sus promesas electorales de resolver las demandas crudamente expuestas por la rebelión del 18-O, habiendo aventurado algunas/os de sus próceres la posibilidad de impulsar la negociación por rama productiva, el pleno derecho a la sindicalización y a la huelga, la puesta en marcha de un sistema impositivo progresivo y con una distribución de ingresos más igualitaria, el fin de las AFP y de las miserables pensiones entregadas por este sistema, el fortalecimiento de Ferrocarriles del Estado, así como unas reformas de mayor calado para resolver las graves injusticias que, ahora lo saben es@s votantes, no van a ser resueltas por la administración R-NR. Siguen pendientes de abordaje y resolución muchas e importantes problemáticas que cruzan nuestra formación: que exista verdad y justicia en los casos de 6 decenas de asesinad@s y miles de herid@s que arrojó la cruenta represión por la que los agentes armados del Estado, mandatados por el genocida Piñera y azuzados por los ricos, buscaban aplacar la legítima protesta popular durante el levantamiento del 18-O; el otorgamiento de la libertad incondicional para l@s Pres@s Políticas de aquella Rebelión; y la refundación de las policías, todas las cuales constituyeran promesas de la campaña presidencial de Boric que se diluyeron de inmediato el 11 de marzo.

 

Al terminar el período, a vista y paciencia de tod@s, la derecha política se mofa de Boric, AD y el arcoíris del R-NR, cuando quita y pone acuerdos en la mesa para improbables acuerdos políticos, orientados a determinar el tipo de organismo que redituará una nueva propuesta de Constitución. Y lo peor es que las fuerzas oficialistas se dejan llevar por esos cantos de sirena, para luego caer defraudados.

 

 

 

 

 

 

 

4) Aprobar o no aprobar, ¿he ahí la cuestión?

 

Titi me preguntó si apruebo o rechazo, que, si no voto, le hago juego a los fachos” (Leo Pagnieri)

 

Desde que el Morgan Stanley, uno de los principales bancos de Estados Unidos, señalara que “el rechazo sería algo negativo para el país”, o sea para Chile, y que alababa a la Convención por redactar un documento “razonable”, que aplacaría las demandas por derechos sociales sin destrozar la economía de mercado (agencia Bloomberg, asesoría financiera e información bursátil), se pensó que el triunfo del apruebo estaba asegurado, pues contaba con la venía del imperialismo.  Incluso el reconocido actor gringo Mark Ruffalo, apoyó la campaña “Aprobar es humano” de Amnistía Internacional y en un video de un minuto, el artista señala que, “es hora de pasar la página de la crueldad de los años de Pinochet”. Bernie Sanders entrega su apoyo al apruebo en el plebiscito constituyente: "El domingo, el pueblo chileno podrá votar por una nueva Constitución, reemplazando la antigua y antidemocrática redactada por el dictador Pinochet", escribió el demócrata estadounidense vía Twitter. Otra vez se repetía la historia de que con un lápiz y un papel se podía derrotar políticamente la dictadura del capital monopólico-financiero, impuesta desde el 11 de septiembre de 1973, aunque ahora con un lápiz bic y el imperialismo aparece como garante de los “cambios estructurales” para el bien de millones de chilenos. 

 

En tanto, una serie de artistas “progres”, los mismos que han venido apoyando la “democracia” de los 32 años y 8 meses, facilitaron sus rostros para la campaña del apruebo, tratando de sumar aguas al proyecto político de la pequeñaburguesía empeñada en asegurar la paz social para que las 7 familias dueñas del país pudiesen seguir obteniendo sus astronómicas ganancias.  Desde Anita Tijoux hasta Tomo como Rey, Comandos por el Apruebo dieron a conocer parrilla de artistas para cierre de campaña y anunciaron que ello se realizaría en Santa Rosa con la Alameda, a partir de las 18:30, y que también contaría con la participación de emblemáticas figuras de la TV. "Va a ser un evento familiar, pacífico", señalaron las organizaciones convocantes del Apruebo, en voz del diputado del Partido Liberal, Vlado Mirosevic, que obtendría sus migajas por coordinar la campaña.

 

Otro apoyo a la campaña del apruebo lo entregó la Central Unitaria de Trabajadores. Según su timonel, David Acuña, “las transformaciones sociales, políticas y económicas que atraviesa el mundo, donde el aumento de dinamismo en las cadenas de producción y la deslocalización del trabajo, son elementos impulsados por el neoliberalismo que ponen “en el centro de su interés el gran capital de las trasnacionales””.  Las comillas finales son del Capo de la sindical.  Algún día se sabrá qué relación pueden tener un capitalismo “neoliberal”, que a nuestro parecer no existe, con el gran capital trasnacional.  Por otra parte, el actual presidente de la CUT indicó que su apoyo a la opción del apruebo se sostenía en que el texto borrador de la convención constitucional aseguraba el fin del Estado subsidiario, pero dicho principio quedaba consagrado en lo que sería el inciso tercero del artículo 1 de la “nueva” constitución, que miles y miles juraban haber leído.  Curioso resultó el apoyo a la misma opción apruebo por parte de la Central Clasista de Trabajadores.  Tal vez el primero de mayo de 2023 marchen ambas centrales sindicales para sepultar al capitalismo “neoliberal”, ese que sólo existe en los libros de los intelectuales orgánicos de la burguesía y en la mente del exReformismo y el Neorreformismo para seguir engañando ilusos.

 

El primero de septiembre parecía que la opción Apruebo era grito y plata, aparecía como una carrera ganada de antemano. El cierre de campaña del apruebo llenó la Avenida Libertador Bernardo O’Higgins con -al menos- 500 mil personas. Columnas sindicales, feministas y de otras expresiones ciudadanas se fueron reuniendo desde temprano en el lugar contemplado para el cierre. El encuentro reunió a diversas figuras políticas y del mundo de la cultura que subieron al escenario a manifestar su apoyo por la nueva Constitución. Todo indica que el ancla, el anzuelo, de los artistas progres sigue siendo efectivo. Por otro lado, el cierre de campaña del rechazo fue en el Anfiteatro Pablo Neruda en el Parque Metropolitano de Santiago, por el lado de la comuna de Vitacura. El encuentro reunió a 60 movimientos ciudadanos y alrededor de 400 personas. Este sólo hecho debe llevar a la reflexión a la hora de determinar si los procesos sociales pueden ser definidos por aspectos meramente cuantitativos.

 

El 2 de septiembre, para asegurarse la concurrencia a votar y pese a que ya había establecido el voto obligatorio, el sacrosanto Estado capitalista chileno anuncia que el transporte público sería gratuito y se aumentaría su flujo no sólo en la capital, tal como ha ocurrido en cada una de las últimas elecciones. El Ministro de Transportes, Juan Carlos Muñoz, se reunió con los operadores de los servicios de transporte público para asegurar un aumento de la frecuencia de buses durante la jornada electoral que se vivirá el próximo domingo en nuestro país. Muñoz indicó que ese día se registraría un aumento importante de la frecuencia de transporte en todo el país, incluyendo el terrestre, marítimo, fluvial y lacustre, para acercar a los electores a sus lugares de votación. Aportó que, “Hemos planificado una operación que concentra la mayor frecuencia de buses, la mayor disponibilidad de servicios, en el periodo donde históricamente las personas salen a votar que es entre las 9 de la mañana, dos, tres de la tarde. Es ahí donde nosotros vamos a tener la mayor cantidad de oferta de transporte público”.

 

Como gusta decir a Carlos Pinto, “nada hacía presagiar” el triunfo del rechazo. Sin embargo, existe un conjunto de causas que permiten explicar el hecho en sí y como siempre, son múltiples factores, por lo tanto, escapa a este análisis la posible explicación.  Como siempre, será el conjunto de quienes buscan y luchan por subvertir el actual sistema de dominación capitalista, los llamados a buscar las explicaciones y las posibles orientaciones a seguir.  Aquí sólo podemos esbozar algunos elementos, como insumo: las palabras del propio Merluzo cuando señaló en más de una ocasión “si gana el rechazo…”, dando a entender que esa opción tenía severas posibilidades de triunfar; la campaña agresiva a través de las redes sociales de la llamada “secta de los arbolitos” (militancia del Frente Amplio y el Partido Comunista), en donde aseguraban que se sepultaba la herencia de la Dictadura cívico-militar en todos los ámbitos y con una simple lectura del borrador constitucional era ostensible el engaño de dichas ofertas y el texto sólo eran declaraciones de buenas intenciones y muchas palabras bonitas; el uso a rajatabla del quórum de los 2/3 debido al marco de la ley 21.200; el rechazo de terminar con las concesiones mineras y lograr la renacionalización plena de los recursos naturales; la colosal pasada de raja de la llamada “iniciativa popular de norma”; la detención de Héctor y Ernesto Llaitul, que fue la consecuencia de acciones legales iniciadas por el gobierno de Piñera; el primero de septiembre Fasciskia Siches tuvo que salir a explicar la frase del caporal del glorioso Partido exComunista, Guillermo Teillier, quien llamó “a defender el triunfo del apruebo en las calles”; la imposición del voto obligatorio, con amenazas de cárcel y multa, que tal vez jalonó a que quienes no venían votando, casi un 60 por ciento del padrón electoral, votaran nulo o derechamente, rechazo; la situación económica de miles y miles, afectados por los sueldos miserables, las constantes alzas de los productos de primera necesidad; ya se había negociado que todas las materias que el borrador constitucional dejará a la ley como forma de concreción, sería resuelto por el actual Congreso nacional, con un quórum de 4/7.

 

No deja de llamar la atención que el R-NR utilizara como argumento favorito de su empalagosa campaña que, “como nunca en la convención constitucional se reunieron una pléyade de profesionales de alta gama, muchos doctorados, con estudios en prestigiosas universidades chilenas y extranjeras; unos verdaderos y genuinos EXPERTOS”.

 

La noche del 4 de septiembre, la derrota del proyecto político ofrecido por la pequeña burguesía como salida a la crisis política nacional abierta el 18 de octubre de 2019 se reflejó nítidamente en la cara de sus autores; era el fracaso del proyecto político delineado por el propio bloque en el poder, el 12 de noviembre de 2019, en boca de Piñera. Fue un duro revés, el que debió haber sido aprovechado por el campo popular para pasar a la ofensiva. Sin embargo, como siempre, la debacle se superó “por arriba”. Pero no está demás señalar que, por algunas horas, quienes desde 1988 -y desde antes- vienen bregando por la superación radical del capitalismo, sintieron que el ejemplo del 18-O germinaba en la forma del rechazo a la farsa electorera, aunque se enmarcase en el contexto del juego electoral patronal (pues anular, abstenerse o el voto blanco, son parte del acto electoral). Quedaba claro la necesidad de pasar a la unidad en la acción de las fuerzas de la izquierda anticapitalista, fuera del espacio oficial, prosiguiendo el camino de la lucha autónoma y por el cambio revolucionario. Con todo, el BPE quedó impactado por el resultado de las urnas.

 

La CAM califica el plebiscito como “un show folclórico”. Mediante una carta abierta, la agrupación criticó al gobierno de Boric y manifestó que “responsabilizamos a este gobierno nefasto de dar continuidad al extractivismo indiscriminado, y la militarización de nuestro territorio mapuche en alianza con las grandes empresas forestales y conglomerados económicos que históricamente han robado y empobrecido a nuestra gente”. “Disfrazando hoy, su verdadera intencionalidad, con este show folclórico como es el plebiscito, que se desarrolla justamente estos días, del cual lamentablemente se hicieron parte algunos que, con la finalidad de recibir migajas, fueron capaces de negociar y traicionar a nuestro pueblo”, agregó la organización mapuche.

 

 

5) Reaparecen en el horizonte los “expertos” y son finalmente definidos los “bordes”

 

Con todo, fueron sólo algunas horas de zozobra, pues el sistema de dominación capitalista no se ha de derrumbar debido al resultado de un acto electoral. La ‘salida por arriba’ es un mecanismo natural para los partidos políticos de la “democracia” de los 32 años y meses. El mismo 5 de septiembre, el Merluzo convoca a los presidentes de las cámaras del Congreso: del Senado, Álvaro Elizalde y el timonel de la Cámara de Diputados, Raúl Soto, a palacio. En la instancia, los sirvientes de la patronal consensuaron las primeras diligencias para reiniciar el debate sobre una nueva Constitución, acordando radicar en el Congreso el liderazgo para establecer un nuevo mecanismo de redacción, que se materializaría en una reforma constitucional en el corto plazo. Sin arrugarse y pasándose por la raja el resultado de las urnas, dando a entender que no entienden nada desde 1990, desde antes, Elizalde anuncia que, “junto al presidente de la Cámara convocaremos esta semana a todos los partidos con representación parlamentaria, a las bancadas, también escucharemos a otros movimientos sociales y representantes de la sociedad civil, con el objeto de promover un diálogo que nos permita a la brevedad posible transmitir una certeza a Chile: el camino constitucional para cumplir con el compromiso de avanzar hacia una Constitución, que sea un factor de unidad entre todas las chilenas y chilenos”. Anunciaron reuniones con la CUT y la CPC (a los de la Central Clasista de Trabajadores ni los nombran, pese a su llamado a aprobar el tongo). Y, para que nadie se salga de madre, Sotito remachaba: “Este acuerdo va a decir relación en cómo se habilita este proceso constituyente, con cómo se conforma este órgano, cuáles son las reglas del juego, cuáles son los plazos, las reglas de funcionamiento y a partir de ahí espero lo antes posible que demos una tranquilidad y una certeza al país que por estos días se hace muy necesario”.  Como plazo para iniciar el “nuevo” proceso, se habló en un comienzo de antes del 11 de septiembre para arribar a un primer acuerdo sobre la materia, aunque al terminar este análisis no se sabe nada al respecto. La ‘cocina’ llegó a Chile para quedarse.

 

El 6/9, se produce el cambio de gabinete, apenas transcurridos 6 meses de instalado el nuevo Gobierno, que desde su arranque ha demostrado ser la prolongación del aparato estatal al servicio de las familias dueñas de Chile y servil al imperialismo. Pese a la llegada a la subsecretaria de Interior del militante del PCCh Nicolás Cataldo, que asumiría en reemplazo del socialista Manuel Monsalve, la administración de la pequeña burguesía incorporó directamente a la exNM, heredera de la Concertación, nombrando en Interior a Carolina Tohá, ex vocera del gobierno de Michelle Bachelet, mientras que el ‘Mamo’ Monsalve, muy funado, es traspasado al M. de Desarrollo Social. Es decir, Boric y el R-NR optan por la política de negociar con sectores reaccionarios, abjurando de su propio discurso de “prometidos cambios estructurales”.

 

El mismo 6/9, en respuesta a la clara señal que el camino y la actitud que adoptará la institucionalidad burguesa, ahora blindada por el Frente Amplio y el PC desde el Ejecutivo, es la continuidad de la política de la “democracia de los acuerdos de noviembre de 2019”, se desata en un amplio sector del estudiantado de colegios y liceos emblemáticos de la capital el inicio de una movilización, demandando que el nuevo proceso constitucional sea con “participación de la gente”. Aquí debemos señalar, al menos, un par de opiniones. Las consignas que movilizan a los estudiantes secundarios de los establecimientos mencionados, en esta ocasión, responden a la reacción de sectores políticos con presencia en dicho ámbito que apostaban por el Apruebo; sin embargo, un sector del estudiantado siguió movilizándose por sus demandas históricas, con la rebeldía de siempre, a través de la acción directa y no teniendo como objetivo el curso del itinerario institucional de la patronal. Las movilizaciones de los secundarios vuelven a circunscribirse al espacio de los colegios y liceos emblemáticos, los de las 8 cuadras alrededor del centro de Santiago y del palacio presidencial, lo que sólo se vio interrumpido para el 18 de octubre de este año, en donde se evidenciaron protestas estudiantiles en toda la ciudad, en todas las ciudades. Queda pendiente que la organización estudiantil revolucionaria pueda extenderse a colegios y liceos periféricos y se enlace con otras fuerzas sociales de carácter rupturista, avanzando en la articulación de una gran fuerza movilizada, capaz de dotarse de un proyecto nacional y popular alternativo. Con todo, no cabe ninguna duda que a esta altura de la vida, a esta altura del devenir histórico, son los jóvenes los que motorizan la Historia, aunque sepamos de memoria que son los trabajadores los portadores de una nueva sociedad.

 

También el 6/9, los pacos ingresan al Instituto Nacional y realizan detenciones selectivas de estudiantes en el centro de Santiago. Según denunciaron organizaciones sociales, el ingreso de las fuerzas represivas se debió a la expresa petición de la autoridad municipal, encabezada por el PCCh. Cientos de estudiantes secundarios realizaron durante esa jornada una masiva marcha desde Plaza de la Dignidad hacia el centro de la capital, la cual culminó con enfrentamientos con las fuerzas policiales, mientras el Gobierno anunciaba su cambio de gabinete. En tanto, la integrante del departamento de DD.HH. del Colegio de Psicólogos, Raquel Torres, hizo un llamado al gobierno a detener la “violenta represión” contra niñas y niños.  Torres, integrante además del Grupo de Iniciativas por la Libertad de los Pres@s Polític@s, hizo un llamado al Gobierno a, “terminar con la violenta represión” y “poner freno a esta violación a los derechos humanos que se han mantenido y se profundizan desde el 18 de octubre, cuando comenzara el estallido social. No podemos permitir que vuelvan a ocurrir las mismas situaciones de ese momento, como mutilados, presos y asesinados. Queremos exigir el término de la violencia contra nuestros estudiantes que son niños y niñas que deben ser protegidos por el Estado que es garante de sus derechos”. En las manifestaciones, participaron estudiantes de los establecimientos públicos de la capital, como el Instituto Nacional, Carmela Carvajal, el Liceo José Victorino Lastarria y del Liceo 7 de Providencia.

 

Demostrando el discurso vacío con el cual se quedó el actual Gobierno, en donde dicen para la galería cosas progresistas y terminan subordinándose a la derecha, el diputado Leonardo Soto, consultado por una Constitución escrita por “expertos” y el Congreso, responde: “Me parece que comenzó el tongo de la derecha”, sin embargo, veremos lo que finalmente se acuerda y no olvidemos que ya la derecha ha señalado que la nueva Carta debe ser redactada entre 4 paredes. A juicio del diputado, “ellos, la derecha, están pavimentando el camino para hacer fracasar el nuevo proceso constituyente, con propuestas alejadas del sentido común irreales y engañosas, porque tales expertos no existen, sino que son muchos constitucionalistas de derecha, liberales o conservadores”.  Para el diputado “socialista”, es la vuelta de la Comisión Ortúzar, redactora de la Constitución de 1980. En la misma línea, el 11/9, el actual Presidente señala que el triunfo del Rechazo no significa el fin del proceso constitucional y que, “el camino de cambios pasa también por hacerse cargo de tener una nueva Constitución escrita en democracia”. Es preocupante lo dicho por el yellow, pues en Chile no existe democracia desde el 11 de marzo de 1990, incluso si sólo nos atenemos a lo estrictamente formal, que es la mantención de la dictatorial Constitución de 1980. Y en la ocasión ratificó: “estamos trabajando en conjunto con el Parlamento para aunar las voluntades necesarias y llegar a acuerdos que permitan delinear ese futuro en el corto plazo”. Es decir, el guatón ni siquiera se plantea descartar al Congreso como interlocutor válido para una nueva Carta, sino que lo ratifica como el sujeto que debe definir los mecanismos de otro tongo constitucional. Ni en sueños a Boric se le ocurre que la nueva legalidad la deben escribir quienes a diario sufren la explotación capitalista.

 

Otra de discurso vacío es la PC Karol Cariola, quien señaló, el 4/9, que el fraude constitucional es, “la síntesis de años de movilizaciones sociales que buscaron mejorar la calidad de vida de los chilenos y chilenas y que se concentraron finalmente en el estallido social de octubre de 2019”.  Dicho enfoque trastoca groseramente los sueños y metas que en verdad animaron aquel alzamiento popular del 18-O.

 

A petición expresa de Boric, será el Congreso el órgano mandatado para confeccionar el itinerario del nuevo tongo. Al llamado del Merluzo, acuden prestos los partidos políticos oficialistas y los de Chile Vamos, restándose los Republicanos de Kast. Como un dato que puede parecer anecdótico, pero que da cuenta de cómo las fuerzas que parasitan de esta seudodemocracia creen ser administradoras de una verdadera democracia, es la permanente creación de ‘conceptos políticos’, que para la ocasión corresponde al de “borde”, que se escucha ya el 6/9, en boca del jefe de la reaccionaria UDI, Javier Macaya. Este afirma, “que lo peor que puede pasar es delinear los bordes que debe tener la nueva constitución”, cuando es lo que precisamente van a consumar los miembros del estrato político civil, protagonista de la ‘democracia de los 30 años’. En relación con lo indicado, el conjunto de los partidos políticos se pusieron como meta para redactar los mecanismos del nuevo entuerto constitucional el 11 de septiembre de 2023, cuando se cumplirán 50 años del fatídico Golpe militar. Por lo que se sabe, el itinerario será parecido al que ya ha fracasado; es decir, elección de una Convención Constitucional, elaboración del texto y plebiscitos. El PDG y Republicanos se oponen a dicha Convención. En tanto, Manuel José Ossandón, el payaso mentiroso, sostiene la idea de una “comisión de expertos”, presidida por el mismísimo ¡Ricardo Lagos! 

 

El 12/9, la ‘cocina’ empieza a sacar sus platos gourmet: el órgano redactor será 100% electo y contará con respaldo de un Comité de Expertos. Buscan un nuevo fracaso y con ello prolongar eternamente la dominación patronal con una legalidad milica; sin duda, no entendieron nada. Y como si fuera poco, se mantendrá en el proceso de instalación de la nueva estafa constitucional el quórum de 4/7 en el Congreso para los acuerdos sobre materia del itinerario, lo que fue ampliamente aplaudido por el propio diputado Soto, el mismo que vociferaba en contra de las posiciones de la derecha. Penoso resulta ver cómo los partidos oficialistas asumen eso de los quórums dejados por Jaime Guzmán. Otro dato de la causa: revelando que buscan el fracaso, para que todo se prolongue, es que la votación será obligatoria. El capo del Partido exComunista, Guillermo Teillier, ya otorgó su consenso a la existencia del comité de expertos. Tras la paletada, nadie dijo nada.

 

La derecha ya ha fijado los “bordes”: “vamos a defender que la unidad del Estado sea una piedra angular para cualquier conversación, vamos a defender que acá los chilenos tengan derecho a elegir, nosotros vamos a defender que acá no haya un sistema único de salud, vamos a defender que acá los chilenos y los trabajadores chilenos sean los dueños de sus fondos previsionales, esos son por supuesto temas de borde que son temas que son indispensables para cualquier conversación”, Bellolio dixit. Sabemos que existen otros bordes, como no terminar con las concesiones mineras, no suprimir los derechos de agua, no liquidar nuestra dependencia del imperialismo; es decir, los famosos bordes son la mantención de la dominación de las clases dominantes. Para asegurar el porcino, digamos, la derecha quiere incluir en la Comisión de expertos al Presidente de la Corte Suprema.

 

El 22/9, el yellow da a conocer que quiere una CC con ‘bordes’ más claros, adoptando la palabra-concepto de la derecha y para que nadie se llame a engaño remata: “una Constitución más general, creo que no tiene que abordar cada una de las demandas identitarias que existen en la sociedad”, o sea que “nadie se pase la película”. Al día siguiente y era que no, el P. Republicano ya era parte de las negociaciones y Chile Vamos indicaba su compromiso “con avanzar hacia un Estado Social de derecho, el fortalecimiento de los derechos sociales, pero resguardando siempre la igualdad ante la ley y la libertad de las personas” y ampliaba los bordes tales como, “la unidad del Estado de Chile; la existencia de tres poderes del Estado autónomo e independientes; la existencia de un Congreso bicameral compuesto por una Cámara de Diputados y Diputadas y un Senado; la protección del derecho a la vida; la protección del medio ambiente; la protección de la propiedad; haciéndola extensiva a los fondos previsionales y al aprovechamiento de las aguas” y colorín colorado…

 

En esos días de septiembre, en lo que mueve un poco a risa, anotemos que la tenebrosa UDI señalaba que no aceptaría presiones de los ultras del P. Republicano, lo que nos recuerda esa vieja discusión de la década de los 90, donde algunos decían que RN era menos derechista que la UDI. Por su parte, el PDG, demostrando su astucia para ir aumentando adeptos y en medio del mierdal de la negociación de los mafiosos partidos políticos, de los cuales igualmente son parte, indican que, “lo que se está haciendo hoy día es un trabajo entre cuatro paredes, que no está representando al 62% de las chilenas y chilenos que el 4 de septiembre rechazó la propuesta constitucional. Por lo tanto, que se haga entre ocho representantes de algunos partidos políticos o sectores de la política nacional para nosotros no es representativo de la voluntad de las chilenas y chilenos”; luego, los culpables son otros.

 

El nuevo acuerdo va tomando forma y ya se habla de 125 integrantes, 9 escaños reservados y paridad de entrada y salida, en lo que es la CC y se usará el consabido método electoral D’Hondt. Sobre el Consejo de Expertos y Expertas (CEE), el oficialismo y la DC considera que debe tratarse de un órgano paritario compuesto por 25 a 30 personas; debe consistir en “una entidad que preste asesoría reglamentaria y técnica en materias sustantivas” y debe estar integrado, “por un número acotado de abogados, abogadas y cientistas políticos/as, con expertiz en diseños constitucionales y derechos fundamentales”. Si está pensando postular a esta Comisión, le podrán: “pedir ciertas certificaciones para acreditar la calidad de expertos/as. Ejemplo: doctorado, productividad científica CNA, actividades académicas, experiencia profesional y trayectoria en órganos del Estado, entre otros factores”.   Bien dicen, y bien se sabe, que las segundas partes nunca son buenas. Días más tarde ya se hablaba de 134 integrantes de la convención constitucional.

 

El 4/11, surge otra sorpresa en lo relacionado con este renovado timo: Los partidos con representación en el Congreso concluyen discusión sobre el “árbitro” de la futura CC y acuerdan generar un Comité Técnico de Admisibilidad, integrado por 14 juristas. Dichos miembros deberán contar con una "destacada trayectoria profesional y académica" y ser ratificados por ambas cámaras del Congreso. Además, se espera que a mediados de ese mes comience la discusión sobre el futuro órgano redactor. Este árbitro tendrá por tarea, nada más y nada menos, que fiscalizar el cumplimiento de las bases institucionales y llevará el nombre de Comité Técnico de Admisibilidad. O sea, todo este asuntillo estará más amarrado que moño de vieja.

 

En alguna parte, Marx ya nos previno: la historia se repite dos veces, una como tragedia, la otra como comedia.

 

 

6) Estudiantes movilizados, el pueblo-nación Mapuche en pie de lucha, el 11 de septiembre y el 18 de octubre, y otras movilizaciones

 

La coyuntura del BPE del 4/9 encuentra a los estudiantes secundarios, y en alguna medida a los universitarios, movilizados tras sus demandas históricas, no resueltas por la democracia de cartón instalada desde 1990. En un primer momento se pensó que los estudiantes volvían a las calles en función del resultado electoral, pero esa sensación se descartó al irrumpir demandas que tienen relación directa con el tipo de educación que se entrega, con las condiciones materiales en donde se estudia y con la represión que sufren desde el Estado y sus aparatos.

 

El 7/6, se llevan a cabo masivas “sentadas” al interior de algunas estaciones del Metro, generándose nerviosismo entre las autoridades de turno, pues retornaba la sombra del alzamiento popular del 18-O, que tuvo sus orígenes en acciones similares. Ese día ingresan los pacos, en forma violenta, al Liceo Manuel Barros Borgoño. En La Moneda, el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, encabeza una reunión con el general Marcelo Araya, director de Orden y Seguridad, así como el general Enrique Monrás, jefe de la Zona Metropolitana Oeste. El Ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, se reunió con dirigentes estudiantiles del Liceo de Aplicación, del Instituto Nacional y del Liceo Amunátegui, pero los estudiantes abandonaron el encuentro. Lo positivo de esta reanimación de las movilizaciones de l@s secundari@s es que fue producto del llamado conjunto de una serie de organizaciones sectoriales. Los estudiantes se movilizan, de acuerdo con el petitorio que han difundido a través de las redes sociales, por transporte gratuito, mejoras en infraestructura de los establecimientos frente al creciente hacinamiento, falta de materiales, mejorar la calidad del menú que entrega la Junaeb y también exigen internet para tod@s. Además, exigen se ponga atención a la salud mental de la población estudiantil, fortalecer el concepto de Educación Sexual Integral, protocolos contra la violencia machista, y prácticas laborales aseguradas y pagadas en los liceos técnico-profesionales. Uno de los jóvenes, del INBA, afirmó que exigen condiciones mínimas de estudio, porque en el caso de este establecimiento les dan comida podrida, naranjas con gusanos, los alumnos internos no tienen qué comer, y saben que si sus demandas no se expresan en las calles, nadie las va a tomar en cuenta. 

 

A raíz de estas movilizaciones, el subsecretario de Interior, el ‘Mamo’ Monsalve, afirmó que los chilenos están cansados de la violencia, “no se trata de demandas del pueblo chileno y para ello, se han desplegado fuerzas policiales para impedir el ingreso de manifestantes a las estaciones del Metro, además de las medidas preventivas adoptadas por la empresa para evitar desórdenes en los andenes”, porque, sentenció, “en nada ayudan las manifestaciones en el desplazamiento de las personas en el transporte público”. Y no se quedó atrás la novel cabecilla de Interior, Carolina Tohá, atacando las manifestaciones posplebiscito: “Quemar buses o romper semáforos no ayuda a crear mayorías”.  Y a renglón seguido intentó dar una lección política, o sea de lo que la pequeña burguesía entiende por hacer política, como principales GMRS de la dominación capitalista: “Si queremos ser coherentes con lo que nos dijo la ciudadanía en ese estallido, lo que necesitamos, sin duda alguna, no es otro estallido, sino dar respuesta a esas demandas ciudadanas (…)”. Lástima que ningún periodista le inquiriera acerca de las fantásticas respuestas que, como GMRS y del R-NR, le están dando a las demandas levantadas con ocasión del 18-O.

 

Sin embargo, los estudiantes, siguiendo su tradicional porfía y haciendo gala de cumplir cabalmente lo señalado por el presidente Salvador Allende, prosiguen sus protestas el día 7 de septiembre. Reiteran las sentadas y ocupaciones de estaciones de Metro, levantamiento de barricadas en distintas zonas de la capital, marchas desde la Plaza de la Dignidad, etc. Una estudiante del Liceo 4, ubicado en Santiago Centro, denunció el gran deterioro de la infraestructura y las deficientes condiciones de los equipamientos de su establecimiento educacional: “Tenemos aguas turbias en los baños, las ventanas de las salas están rotas, tenemos estufas pero no tenemos gas, la comida es asquerosa y también tienen aguas turbias en la cocina (…), nos dan huevo con gusanos y con bichos” (9/9, DUC), declaró y agregó que tanto en la sala como en la cocina de su liceo hay goteras.

 

En el período, a pesar de la creciente militarización, de la arremetida represiva contra la dirigencia de la CAM, de la grotesca campaña difamatoria del BPE acerca de los medios y objetivos de su lucha, continúan las acciones de sabotaje a los intereses empresariales y de resistencia por parte de las organizaciones político-materiales del pueblo-nación Mapuche. El accionar de ellas logra irradiarse a la parte norte de la provincia de Arauco; a las comunidades pehuenches entre el Ralco, en la provincia de Biobío, hasta Panguipulli, en Los Ríos; así como al valle central de esta última región. En contra de los montajes policiales y judiciales, junto con la exigencia de ser agrupados con los demás Presos Políticos Mapuche, el 27/11 se inicia una huelga de hambre líquida de los integrantes de la CAM Héctor y Ernesto Llaitul, Ricardo Reinao y Esteban Henríquez, detenidos en el CCP Biobío.     

 

A 49 años del Golpe cívico-militar, se despliegan por todo Chile acciones de homenaje, recuerdo y lucha. El gobierno intentó darle un carácter privado y de bajo perfil a la fecha e hizo un llamado a que no se produjeran manifestaciones violentas. En la tradicional marcha desde el centro de la capital al Cementerio General, fue ostensible el rechazo que genera la presencia de partidos políticos del FA y del PCCh, en donde más de un militante fue increpado, debido a que el nuevo gobierno, más que progresista, ya es visto como la nueva cara de los dueños del país. En la noche de esa jornada fue que se desataron las acciones directas en los territorios populares, con levantamiento de barricadas y ataques a Comisarias emblemáticas en cuanto a represión en contra del pueblo.

 

El 13/9, el Senado se da luz verde a la séptima prórroga del estado de excepción para la Macrozona Sur, a pedido del Gobierno de la ‘Esperanza’ y la Tohá afirma que es esta una medida que va en apoyo de las personas que están viviendo una situación de inseguridad en esa región. Al día siguiente, la diputada Mapuche Emilia Nuyado emplaza a la Ministra por el atropello a un comunero mapuche por parte de una tanqueta policial, en la provincia de Arauco. La parlamentaria exigió al Gobierno pronunciarse respecto al operativo que terminó con 19 personas heridas. El hecho se produjo cuando efectivos policiales detuvieron a un grupo de personas, acusadas de una supuesta tala ilegal de madera.  La diputada Mapuche agregó que, “hoy vemos señales del gobierno solo hacia el mundo empresarial relegando a las comunidades a un segundo plano”.

 

El 24/9, en Valparaíso, cientos de personas se reunieron para expresar su oposición al acuerdo del TPP11 y exigiendo al guatón Boric el retiro de la iniciativa que se debía discutir en el Senado. Amplio rechazo generó entre las organizaciones sociales y de DDHH la posibilidad que se alcanzara un acuerdo en el Senado para votar el TPP11, que consideran como un amarre grave para la soberanía nacional. Inclusive, algunos agregan que el tratado, “blinda de tal manera a las transnacionales que ante cualquier regulación, norma o política pública que genere Chile y que sea considerada como dañina a sus inversiones (inclusive expectativas de ganancias), estas corporaciones transnacionales tienen la facultad de llevar al país a tribunales internacionales creados para estos efectos, cuya operatividad son altamente cuestionadas por expertos y académicos”. El 25 de septiembre, 560 organizaciones sociales emplazan a Boric y al Senado a no aprobar el TPP11. A través de una carta, les señalan que las agrupaciones, "no olvidamos que en todo el proceso el Estado nunca ha levantado información fidedigna relacionada a los perjuicios del TPP-11, es más, toda la tramitación ha sido a espaldas de la ciudadanía". Lamentablemente, y como lo dijimos más arriba, el Senado aprueba el dañino acuerdo pro capital transnacional el 11/10.

 

El 27/9, la Cámara, por octava vez, prórroga el estado de excepción en la Macrozona Sur y el Senado hace lo propio el mismo día, en donde sólo hubo un voto en contra, el de la senadora Fabiola Campillay. 

 

El 6/10, debido a las constantes alzas en los productos de primera necesidad, pobladores de Lo Hermida salen a las calles a protestar. Las sucesivas y fuertes alzas de los bienes de consumo básico tienen preocupadas a las pobladoras de dicha población de Peñalolén, quienes ocuparon las calles del popular barrio para protestar por el encarecimiento del costo de la vida y que ha impactado negativamente en los ingresos de sus familias. “Las alzas en los alimentos están provocando un cambio en la dieta de nuestras familias. Cada vez se come menos carne, pollo, huevo o legumbres, y se come cada vez más fideos, lo que genera que los niños y las niñas no tengan los nutrientes necesarios para crecer de forma sana”, sostuvo una dirigenta social del sector en medio de la manifestación que reunió a unas 400 mujeres frente a la estación Los Presidentes del Metro.

 

El 11 de octubre, por novena vez consecutiva, la cámara de Diputados aprueba prorrogar el estado de excepción en la Macrozona Sur, por 109 votos a favor, 23 en contra y 3 abstenciones. El mismo día, el Senado da su aprobación a dicha restricción de las libertades básicas y el gobierno presenta al Congreso su proyecto de "Estado de Protección y Resguardo", para reemplazar aquel estado de excepción constitucional.

 

Ya el 13 de octubre, de cara a la tercera conmemoración del 18-O, desde el Gobierno llaman a restarse de cualquier actividad violenta en el marco del aniversario. En su perorata, la Tohá no se queda corta: “Hacer un llamado en estas horas también en que hemos vivido tantos hechos dolorosos en estos últimos días a las personas que ese día decidan hacer derecho de su ejercicio a manifestarse a restarse de cualquier actividad violenta, a condenar y aislar a quienes ocupan las manifestaciones para desarrollar delitos, para dañar ciudadanos, para dañar personas, infraestructura pública, equipamientos que están hechos para la seguridad como es la señalética o los semáforos”.

 

Y llegó un nuevo 18 de octubre. Aquel martes partió con barricadas en Santiago, Antofagasta, camino a Minera El Teniente y en el acceso a la División Andina, ambas de Codelco. En la combativa Antofagasta también se registraron cortes incendiarios, a partir de las 7:00, en la intersección de avenida Andrés Sabella con Uribe. Igualmente, hubo barricadas en el Puerto de Arica. Esa madrugada también se registraron barricadas en el camino o en la entrada de faenas mineras, como en Machalí Alto, en la región de O’Higgins, las que se encendieron a partir de las 07:00 en la Carretera del Cobre, cerca del Monumento al Minero y la Minera El Teniente, con una masiva participación de trabajadores, quienes se enfrentaron con Carabineros por el control de la vía, cuyo flujo se vio interrumpido en ambos sentidos por varias horas. En la región de Valparaíso, en tanto, la Federación de Trabajadores de la Minería bloqueó el acceso a la División Andina de Codelco; en el acceso a la faena, aparte de barricadas, se podía ver lienzos con consignas como, “La clase obrera unida, organizada y en lucha, vencerá”.

 

En la capital, por su parte, los combates por el 3er aniversario de la rebelión del 18-O se dieron en varios puntos. En Renca, el tránsito se vio interrumpido en la Autopista Central eje General Velásquez, altura Puerto Montt, donde hubo congestión y tránsito lento desde las 7:00 hasta pasadas las 9:00 por las barricadas de un Comité que exigía el derecho a una vivienda digna. Hubo cortes en Américo Vespucio, en El Bosque; en Grecia con Los Tres Antonios, en Ñuñoa; en avenida La Florida con Walker Martínez, en La Florida; en Vespucio, en Lo Espejo; y en Isabel Riquelme con Club Hípico, en PAC. Asimismo, desde temprano, manifestaciones y enfrentamientos con las fuerzas represivas se toman la Plaza de la Dignidad. Al poco andar, el Metro reporta el cierre de varias estaciones. Pasadas las 19:00, los pacos se retiraron del sector y manifestantes coparon el lugar, por lo que el tránsito fue cortado completamente en ambas direcciones del nodo Alameda-Providencia. La envergadura de la manifestación en el epicentro del alzamiento popular no se veía desde hace ya mucho tiempo. Por otra parte, encapuchados incendiaron un camión en el Barrio Bellavista, incidente que afectó a una máquina de una bodega ubicada en calle Pío Nono, en el sector que divide las comunas de Recoleta y Providencia. Metro informó del cierre por varias horas de las estaciones Santa Lucía, U. Católica, Plaza Puente Alto y Baquedano, esta última sin combinación de líneas. La noche del 18/10 fue testigo de acciones directas en muchas poblaciones de todo Chile; según el Ejecutivo, en 11 regiones, dejando un saldo de más de 50 detenidos. El Gobierno, una vez más, entregó su respaldo sin reparos al accionar represivo de pacos y tiras, pero ni él ni estos lograron aminorar la potencia de una protesta popular que reivindicaba los sueños y demandas de esa gran gesta épica que fue la del 18 de octubre de 2019.

 

 

7) Huelgas y movilizaciones en el frente de trabajador@s

 

El 12/9, se hace efectiva la huelga de personal de Inacap. El sindicato de trabajadores acusó “indiferencia” de los directivos de la entidad frente a sus demandas de mejoras salariales y de las condiciones laborales, por lo cual 1330 trabajadores y estudiantes del instituto profesional comenzaron las movilizaciones. Los dirigentes acusaron que la empresa ha ofrecido contrapropuestas que no se condicen con un beneficio real para los afectados. En ese sentido, se detalló que los trabajadores solicitaron un aumento del 5% de las remuneraciones, pero la empresa solo ofreció un alza del ¡0,5%! para 2022 y que luego subiría a un 1% en 2023 y, en caso de aprobar este contrato colectivo por tres años, a un 1,5% después. El 26/9, la CUT respalda la huelga e interpela a los Ministerios de Educación y del Trabajo. El presidente de la CUT, David Acuña, hizo un llamado al Gobierno al exponer que este no es solo un conflicto entre privados, ya que el 70% de las matrículas del Inacap son estudiantes que optan a la gratuidad con becas estatales.

 

El 3/10, trabajador@s realizan intentos para llevar a efecto una huelga en las cadenas de farmacias Salcobrand (del grupo Yarur) y Ahumada. Dichas empresas, que obtienen suculentas ganancias y que han protagonizado beneficiosas colusiones, tuvieron el descaro de ofrecer “reajustes” de $84 y $381 para locomoción y alimentación, respectivamente. Esta es una huelga sin precedentes, no solo para los trabajadores, sino para la comunidad, especialmente en Salcobrand, que tiene un convenio de exclusividad con 5 de las más grandes Isapres del país, que producto de la indolencia del empleador no podrían adquirir sus medicamentos para dar continuidad a sus tratamientos crónicos, incluidos pacientes GES. Finalmente, luego de una semana de huelga, los trabajador@s de ambas cadenas lograron notorias mejoras en lo ofrecido por sus empleadores y cerraron ventajosos acuerdos para retornar a sus labores.

 

El 14/10, la Confederación de Funcionarios de la Salud Municipal, Confusam, se declaró en estado de alerta nacional ante la decisión del gobierno de aumentar en sólo $100 pesos el valor del per cápita basal, un 1,04%, como aporte a la atención primaria de salud en el presupuesto 2023. La presidenta de la organización, Gabriela Flores, aportó que tal cifra es una burla y que está muy lejos de la realidad planteada en el discurso del Gobierno de fortalecer la atención de salud municipal, agregando que se sienten “traicionados” por las promesas del presidente Boric. “Nos parece una vergüenza que el ministerio haya puesto en el presupuesto aumentar 100 pesos de per cápita basal, que es lo que paga Fonasa por cada paciente inscrito y validado. Está lejos de la realidad de los discursos del propio presidente de la República y de la ministra que han señalado fortalecer la atención primaria, que va a ser la prioridad de gobierno y con los recursos que están planteando estamos muy lejos”, indicó la dirigente. Añadió que si se aplica lo que señala el Banco Central como proyección del IPC de diciembre, de un 12%, el per cápita por cada paciente debiese estar en torno a $10.125 (el valor para 2022 es de $9.048).

 

A comienzos de noviembre, se inician las tratativas para la negociación entre la Mesa del Sector Público y el Gobierno. La multisindical levantó un petitorio que incluye la exigencia de un 15% de reajuste de las remuneraciones, considerando el gran incremento de la inflación. El coordinador de dicha MSP, Carlos Insunza, afirmó que la propuesta de reajuste salarial y de mejoramiento de las condiciones laborales presentada al Gobierno se hace cargo de las condiciones económicas del país ante un escenario de recesión, pero también pone como eje fundamental de la discusión que no sean los trabajadores los que terminen pagando los costos de esta crisis. La MSP, que agrupa a 15 organizaciones de emplead@s públicos, junto a la CUT, entregaron el petitorio al Ejecutivo, en el que solicitan un reajuste salarial del 15%, basado en la proyección anual de 12% que alcanzará el IPC este año, lo que vendría a significar un reajuste real de un 3%.

 

 

 

 

8) El movimiento popular, l@s revolucionari@s y las perspectivas de la lucha de clases

 

Si bien se ha producido un rápido desvanecimiento de las esperanzas puestas por amplios sectores de la población en Boric y las fuerzas del R-NR, debido a varios factores y sucesos: por las mismas prácticas políticas e inconsistencias de los representantes del oficialismo; porque se entendió que aceptar la propuesta de nueva Constitución no traía de la mano una inmediata y verdadera transformación del abusivo modelo de dominación/explotación y se lo vio más como una imposición que un progreso; y por la zozobra que produce en amplios sectores la crisis económico-social pospandemia y secundaria al ajuste imperial del SCM, frente a la cual el BPE no despliega políticas y medidas efectivas, con todo y a contrario sensu de lo que esperábamos, el creciente deterioro en las condiciones de la mayoría nacional no ha gatillado una reactivación de la demanda popular por la mantención de condiciones vitales mínimas, proceso que se ha visto atenuado por las reservas de dineros que fueron traspasados desde el Estado y de los fondos de pensiones a las familias trabajadoras, así como el salvavidas que significa el endeudamiento con la banca, pero en especial por algunos bonos focalizados por el Gobierno en las familias más pobres, algunos ya existentes y otros que el BPE acuerda en el período. 

 

Otro elemento que dificulta o entorpece el despliegue de un movimiento popular más autónomo, clasista y rupturista, pensamos, es la influencia retardataria de las políticas del R-NR en varios frentes y sectores del campo popular, en donde vari@s dirigentes de base pertenecen a los partidos integrantes de AD o bien son cooptad@s por estos. Una prueba sobre su actuación a modo de colchón para contener la movilización popular se puede constatar en el débil cometido de la MSP y la CUT en el actual proceso de negociación del sector público, cuy@s cabecillas pertenecen en su mayoría a los referentes nombrados y que, a fin de evitar una extensión y profundización del conflicto de l@s trabajador@s por sus demandas sectoriales, aceptarán de buen grado las primeras migajas que les sean lanzadas desde el Gobierno y el Congreso.     

 

De todas maneras y atendiendo a las inconsistentes y antipopulares prácticas del Gobierno del R-NR y del conjunto de los GMRS, todo un imperativo resulta para la Izquierda Revolucionaria (IR) y los sectores más avanzados del Movimiento Popular (MP) construir y difundir un programa económico-social que considere las necesidades y aspiraciones de la mayoría nacional, partiendo por la defensa de las condiciones mínimas de vida. Pero ello sólo será posible de realizar al interior mismo de los explotad@s y marginad@s de Chile, organizados en sus instancias naturales y político-sociales, sectoriales y territoriales, y a caballo de un proceso ascendente de luchas, consecuente y con decisión de vencer. Como las condiciones actuales y el período que se abre no son los más promisorios para la causa de los pueblos y l@s trabajador@s, resulta aconsejable y más estratégico aprovechar el relativo repliegue del MP para buscar mínimos acuerdos y alianzas federativas entre las diversas fuerzas de la IR, así como alentar las escuelas de formación y discusión políticas, allanando el camino para arribar a más puntos de acuerdo y avanzar a mayores de unidad.

 

El presente es adverso para la IR y l@s anticapitalistas, toda vez que el sistema de dominación y explotación en Chile, con todas sus fisuras y estrecheces, goza todavía de buena salud. Resulta evidente lo imperioso que la estrategia de l@s que luchan se oriente, prioritariamente, al cuestionamiento de las bases materiales de un sistema que se mantiene y reproduce gracias a la súper explotación y la marginación de ¾ partes de la población, exponiendo lo que es la verdadera y permanente ‘crisis’: la de los de abajo. De igual forma, la realidad nos urge al despliegue de una política orgánica y programática lo más amplia posible, en la cual se integren acciones en los diversos planos del enfrentamiento clasista y que permita la síntesis de los esfuerzos de todas las organizaciones político-sociales que conforman el MP, activando de paso a nuevos sectores de la formación, los más rezagados. La estrategia de lucha que proponemos debe resaltar el plano ideológico, puesto que, para lograr su apoyo, hoy debemos apuntar sobre todo a la subjetividad de l@s explotad@s y marginad@s.      

 

 

 

Círculo de Estudios Políticos Miguel Cabrera Fernández

 

 

Noviembre, 2022

 

 

Dedicamos este trabajo al camarada Miguel Cabrera Fernández, Paine, un obrero agrícola y organizador del movimiento campesino y mapuche antes del Golpe, que cae en combate el 15 de octubre de 1981, en Choshuenco, luchando contra fuerzas conjuntas policiales-militares para resguardar el escape de otros dos combatientes del Destacamento Guerrillero Toqui Lautaro del MIR, destacamento político-militar que él comandaba en su calidad de miembro del Comité Central mirista. Asimismo, a todos los camaradas que se integraron a esta valerosa iniciativa revolucionaria por la liberación popular y que fueron asesinados por la jauría dictatorial: Pedro Yáñez, Jorge; Julio Riffo, Rigo; Próspero Guzmán, Víctor; Patricio Calfuquir, Pedro; Raúl Obregón, Pablo; José Monsalve, Camilo; Juan Ojeda, Gabriel o Pequeco; René Bravo, Óscar; Luis Quinchavil y José Campos. ¡Compañeros de la guerrilla de Neltume, hasta la victoria siempre!

 

 

Fuentes y algunas abreviaturas utilizadas:

18-O: 18 de Octubre de 2019, fecha que da inicio a la más grande rebelión popular de la historia reciente de Chile

AD: Apruebo Dignidad, conglomerado actualmente a cargo del Ejecutivo y expresión del R-NR. Surgió en enero 2021, a partir de la conjunción del Frente Amplio y Chile Digno

BCCh: Banco Central de Chile

BM: Banco Mundial

BPE: Bloque Político de Estado

CC: Convención Constitucional

CEPAL: Comisión Económica para América Latina y el Caribe

CHV: Chile Visión Noticias (online)

CIDH: Comisión Interamericana de Derechos Humanos, dependiente de la OEA

CMF: Capital Monopólico-Financiero, que corresponde a la fracción hegemónica de la gran burguesía 

CMT: Capital Monopólico Transnacional

CPC: Confederación de la Producción y el Comercio

CUT: Central Unitaria de Trabajadores

DF: Diario Financiero (online)

DM: Datosmacro.com

DUC: Diario Universidad de Chile (online)

EC: El Ciudadano (online)

ED: El Desconcierto (online)

exNM: ex Nueva Mayoría, conglomerado que representó entre 2013-18 a los GMRS, y que desarrollaba su política de resguardo del orden en torno a dos ejes: PDC-PR y PS-PPD. Sumó al PC entre 2013 y 2020

FA: Frente Amplio, conglomerado político del neorreformismo y la “tercera vía” socialdemócrata, que desde enero 2021 se suma a Chile Digno para constituir el oficialista Apruebo Dignidad

FES: Formación Económico-Social

FMI: Fondo Monetario Internacional

FNE: Fiscalía Nacional Económica, cuyo jefe es elegido por el Presidente y el actual lo fue por Piñera. Supuestamente, investiga prácticas monopólicas

FS: Fundación Sol (online)

GMRS: Grupos Mantenedores y Reproductores del Sistema

IFE: Ingreso Familiar de Emergencia

IFI: Instituciones Financieras Internacionales; ej.: FMI, BM, BID, etc.

INE: Instituto Nacional de Estadística (de Chile)

IR: Izquierda Revolucionaria

IW: Infowerken.com

LT: La Tercera (online)

LN: La Nación (online)

LV: Lavozdelosquesobran.cl

MDS: Ministerio de Desarrollo Social

MINEDUC: Ministerio de Educación

MP: Movimiento Popular

OCDE: Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos

OP-M: Organizaciones Político-Materiales

PCCh o PC: Partido Comunista de Chile

PDC o DC: Partido Demócrata Cristiano

PDG: Partido de la Gente, de derecha, el que ha sufrido desgajamientos en respuesta a las reformas ofertadas por el gobierno de AD, pasando algunos de sus dirigentes a engrosar los GMRS

PP: Pres@s Polític@s

RBB: Radio Biobío

R-NR: Reformismo-Neorreformismo, el cual encarnan en la arena de la política, por una parte, el neorreformismo y los socialdemócratas de Revolución Democrática, Comunes, Izquierda Autónoma, Convergencia Social, Unir, humanistas y ecologistas, unificados en el Frente Amplio; y de otra, por el reformismo más clásico, a partir del PC, IC, algunos libertarios, ecologistas y humanistas, que en 2020 conforman el pacto electorero Chile Digno

SCM: Sistema Capitalista Mundial

SIMCE: Sistema de Medición de la Calidad de la Educación

Sofofa: Sociedad de Fomento Fabril